
El camino de la meditación es la simplicidad. Solo tenemos que empezar simplemente, y seguir simplemente. Es importantísimo caminar por el sendero, permanecer en el camino, cada día de la vida. Porque el Espíritu fluye hacia nosotros constantemente, llevándonos con él hacia Dios, constantemente debemos descubrirlo.
Un signo muy efectivo de la continuidad de presencia es la quietud física a la que nos adaptamos durante cada meditación. Es algo que es necesario aprender, re-aprender a medida que desaprendemos nuestra condicionada inquietud constante. Simplemente ubicamos nuestro cuerpo el el almohadón o la silla y lo dejamos allí, y nosotros nos dedicamos totalmente a nuestro trabajo de meditar.
Tal es el primer paso que damos para alejarnos del egoísmo y de nuestro interés compulsivo para con nosotros mismos, a la vez que abrimos nuestra conciencia a lo que está más allá de nosotros, la realidad ilimitada que expande nuestro espíritu hacia un Amor impredeciblemente generoso y carente de egoísmo.
El desafío que cada uno de nosotros enfrenta
es ir más allá de donde estamos, ir más lejos.
Somos peregrinos y por lo tanto
debemos caminar.
El camino depende de nuestra voluntad de crecer y desarrollarnos más allá de nosotros mismos, hacia la vida profunda y generosa de Dios. De modo que, para empezar, nos sentamos en quietud.
Luego, al cerrar los ojos suavemente, comenzamos a recitar nuestro mantra. Para meditar, todo lo que debemos hacer es decir la palabra desde el principio hasta el final. No pienses acerca de lo que estás haciendo, de lo que no estás haciendo. No pienses en ti mismo. No te preguntes, “¿Esto es unta total pérdida de tiempo?, ¿Me hará algún bien?, ¿Qué lograré?” Todos estos pensamientos deben desaparecer, ser abandonados. Dejarán de perturbarte si perseveras con el mantra, profundizando tu fe, liberando el poder del Amor del Espíritu. La meditación nos lleva constantemente a un estado de conciencia indivisible, en lo que nos convertimos en uno con el Uno que es uno.
Nuestra unidad crece dentro de nosotros
y con Dios.
John Main
Del libro: Maranatha, Camino de la Meditación
Editorial Lumen, Argentina
Título original: The Heart of Creation
Darton, Longman & Todd Ltd.
PREGUNTA DE LA SEMANA
¿Qué es para ti la constancia?
Publicaré tu escrito en este sitio web donde podrás también ver las reflexiones de otros, lo que nos ayuda tanto en el compartir como en el aprender del otro. Por favor manda tu reflexión a permanecerensuamor@gmail.com